Fuente: http://lapoesiaalcanza.com.ar/index.php/musica/1450-sabina-pide-poesia-que-acaricie-el-oido
El compositor y músico Joaquín Sabina, secundado por el poeta Benjamín Prado, reclamó una poesía que llegue a las personas, que "acaricie el oído".
Rechazó enérgicamente que la poesía deba ser solemne y aseguró que autores como Jorge Luis Borges, Pablo Neruda y César Vallejo demuestran además que no tiene por qué ser "aburrida".
Sabina y su amigo y socio, escritor y ensayista, se presentaron en el Palacio de los Serrano de Ávila, en el ciclo "Literarios 2014". El lugar quedó colmado y hubo personas en los patios y pasillos. Estando ellos al micrófono, fueron inevitables las referencias a la crisis económica que se abate sobre el pueblo español, que padece grandes índices de desempleo y pobreza a raíz de la aplicación de políticas ultraliberales.
Prado se apresta a publicar "Ya no es tarde", y leyó algunos de los poemas que componen esa obra. En suma, ambos se lanzaron a un juego de complicidades, una simulación de enfrentamiento desarrollado a través de la palabra poética, que viajó de la realidad agobiante del país al universo confortable de la amistad entre ambos, los amigos en común y los poetas que ambos admiran.
Tanto así que Prado, reportó el Diario de Ávila, llegó al tono de la confesión personal para decir que las tres cosas mejores que le sucedieron en la vida fueron haber conocido a Rafael Alberti, a Ángel González y a Sabina.
Afloró, como era inevitable, el tema de la corrupción que se está denunciando en España en estos días, que motiva protestas y ocupa grandes espacios mediáticos, tanto que está desplazando a la discusión sobre el modelo que el país debe seguir para sacar del padecimiento a una parte creciente de su población.
"Apesta tanto el lodazal hispano", leyó en un momento Sabina, al anticipar un soneto que escribió sobre el tema.
Tras la presentación, ambos se refirieron en conferencia de prensa a Podemos, la nueva fuerza política española que, según algunas encuestas, está ampliando su base de adhesión. "Ya era hora que saliera algo así", dijo el cantante, mientras el poeta opinó que "el bipartidismo solo ha servido para que los dos partidos que podían gobernar (el Popular y el Socialista, NDR) pudieran ser tolerantes con la corrupción del otro".
En ese contacto con la prensa, la poesía recuperó después su espacio, aunque sin desconectarse de la realidad. Así, Sabina dijo que la crisis lo motiva a escribir "versos encabronados", aunque no llegan a ser sus poemas preferidos, "como tampoco lo eran para Alberti las coplas de Juan Panadero".
"Los poetas y los músicos no cambian nada, pero no se puede vivir sin poesía y tienen que acompañar a la gente con panfletos", sentenció.
Sobre el final hubo una pregunta respecto de los juicios hacia su propia escritura, en particular los de ciertos círculos que expresan una opinión crítica. Tras defender en principio la idea de que cada quien "haga lo que quiera", el músico trazó una frontera terminante, cuando dijo que "la poesía o acaricia el oído o es una cosa de eruditos que se hacen pajas en la Real Academia".