Fernando Ortiz se lo dijo una vez a José Julio Cabanillas: "No te fíes de ése, que va para concejal de Cultura". El mejor poeta sordo de Nervión tenía el mejor oído para distinguir las voces de los ecos y para tender un puente entre poesía y periodismo, un viaje equinoccial de Bécquer a Larra cuyas líneas trazaron en el homenaje al autor de Recado de escribir que ayer se inició en la Academia de Buenas Letras organizado por la Casa de los Poetas del Ayuntamiento y la Junta de Andalucía.