Compuesta por N.P. san Juan de la Cruz y puesta en verso por la más pequeña de sus hijas para la profesión de su querida hermana sor María de la Trinidad y de la Santa Faz.
"Sin arrimo y con arrimo,
sin luz y a oscuras viviendo,
toda me voy consumiendo".
1 Al mundo, ¡oh dicha suprema!,
yo le di un eterno adiós...
... Elevándome sobre él,
mi corazón ya no tiene
fuera de Dios otro arrimo.
Y voy a decir ahora
lo que, cerca de él, estimo:
es ver que mi corazón
y mi alma viven ya
con arrimo y sin arrimo.
2 Y aunque padezco sin luz
en este vivir de un día,
en la tierra, por lo menos,
poseo al Astro celeste
del Amor.
En el camino que sigo
los peligros no me faltan.
Pero por amor yo quiero
vivir sin luz y en destierro.
3 El amor, tengo experiencia,
el bien y el mal que halla en mí
lo aprovecha, ¡qué poder!,
y mi alma transforma en sí.
Y este fuego que arde en mí
penetra mi alma sin tregua.
Por eso, en su llama viva
toda me voy consumiendo
en el amor y de amor.
30 de abril de 1896.
Teresa del N. Jesús y de la S. Faz
rel. carm. ind.