Fuente: lainformacion.com/
La Fundación José Manuel Lara publica 'Juan Ramón Jiménez por obra del instante. entrevistas', un volumen en el que se recopilan cerca de 90 documentos datados entre 1901 y 1958, entre entrevistas, encuestas y cuestionarios, que fueron publicados una sola vez y de manera dispersa
.De esta manera, se rinde homenaje al autor de Moguer (Huelva) y publica por primera vez, en un único volumen, todas las entrevistas realizadas a Juan Ramón Jiménez, en las que se observa una dimensión para muchos "desconocida" del escritor, según ha explicado este martes su sobrina nieta Carmen Hernández Pinzón en declaraciones a Europa Press."En España existe una leyenda de antipático e irónico. Pero en estas entrevistas se observa un común denominador con todos los periodistas: veían en él a una persona amable y sincera", indica Hernández."Paisaje por paisaje no me interesa, me interesa el ser humano", indicó el escritor, según recuerda Hernández, quien destaca que esta obra es "un proyecto" del propio Juan Ramón Jiménez, a quien se conoce en profundidad gracias a esta "magnífica" edición, donde el lector puede ver su "evolución"."Él consideraba estas entrevistas parte de su obra, porque ahí residía su pensamiento sobre todas las dimensiones: poesía, política y los principios más importantes del ser humano", ha señalado.Durante cerca de cuatro años ha trabajado Soledad González Ródenas, autora de la edición, para recopilar todas las entrevistas, algunas de ellas localizadas y otras físicamente en Puerto Rico."ESPONTÁNEO Y SINCERO""Espontáneo", "sincero" y "cercano", Juan Ramón Jiménez opinaba "de todo sin veto ni cortapisa", lo que pudo generar una imagen poco amable a su alrededor. Sin embargo, Hernández lo recuerda con una visión muy distinta."En mi familia era considerado un ser entrañable, era el tío más querido. Es lo que me ha transmitido mi familia. Se volvía loco con los niños, era tierno y delicado. He tenido que conocer la otra faceta porque para mí era completamente diferente", cuenta.De hecho, según añade, tras su fallecimiento encontraron en Puerto Rico, donde residía, una carpeta con cartas de alrededor de 2.000 personas "de primera fila", entre ellas filósofos y poetas, lo que demuestra que "no podía ser como lo pintaban".(EuropaPress)