Fuente: tendencias21.net/
Algunos libros buenos en un año difícil, algunas lecturas que marcan disenso para posibilitar la fuga de esa cárcel de autoridad, consenso y cultura masiva en la que invisibilizan toda producción creativa incómoda, de librepensamiento y/o en lo profundo alejada del poder y el deseo de poder imponer categorías, criterios, canones.
Algunas personas sentimos la necesidad de leer, de leer mejor.
¿Cómo surge la necesidad? ¿de dónde mana primariamente el deseo? ¿Qué alienta a seguir? ¿Cuándo se asume a la poesía como parte sustantiva de tu ser-en-el-mundo y contra-el-mundo? A más basura, más abono y algunos libros realmente sustantivos…
Hace tiempo que suena ridículo aquel slogan político del “España va bien”. Nunca fue más que una falacia. El relato histórico de un cínico vendedor de arena en el desierto. Y el desierto avanzó. Se consumó el saqueo. Lo económico, lo legislativo, lo social. Y llegó a la industria cultural. Y nos volvimos más aciagos, más toscos, más banales. Y de esa aparente victoria del capitalismo, surgieron las más bellas y venenosas flores. Libros que se atrevieron a disentir. Desde la forma, desde la potencia creativa y deliberativa, desde la conciencia y pensamiento no dicotómico, no oportunista ni vocinglero. Surgieron entre un millar de libros de la más variopinta pertinencia o impertinencia, calidad o superficialidad.
De lo que he podido leer este año, incido sobre diecinueve libros a los que debo mejorías en mi salud, en mi desaprender para poder aprender, y en la generación de vínculos entre personas, reflexiones propias y ajenas o entre libros.
No son un canon, ni una antología de los mejores. Son los que a mí me acompañaron este año, de manera insustituible.
LIMBO Y OTROS POEMAS, de Ada Salas (Ed. Pre-textos)
DESDECIR, de Enrique Cabezón (Amargord Ed. Col. ONCE)
DIORAMA, de Rocío Cerón (Amargord Ed. Col. Candela)
EL DÍA ANTERIOR AL MOMENTO DE QUERERTE, de Concha García (Ed. Calambur)
PARA TRAZAR LO IMPOSIBLE, de Arturo Borra (Amargord Ed. Col. ONCE)
VA VERDAD, de Antonio Méndez Rubio (Vaso roto, 2013)
RUIDO O LUZ, de Ernesto Suárez, Daniel Bellón y Carlos Bruno (Amargord Ed. Col ONCE)
DISOLUCIÓN DEL NOCTURNO, de Ildefonso Rodríguez (Amargord Ed. Col. Trasatlántica Portbou)
OBRA COMPLETA, de Héctor Viel Temperley (Amargord Ed. Col. Trasatlántica Portbou)
ZURITA, de Raúl Zurita (Ed. Delirio)
CADA PALABRA UNA CENIZA BLANCA de Olga Muñoz (Ejemplar único)
365 HAIKUS Y UN JISEY, de Joan De La Vega (Rúbrica Ed.)
TUVIMOS, de Rosa Lentini (Bartbely Ed.)
CARTA BLANCA, de Rafael Saravia (Calambur)
LA CIUDAD O LA PALABRA PÁJARO, de Mar Benegas (Ed. Huerga y Fierro)
PORCIÓN DEL ENEMIGO, de Enrique Falcón (Calambur)
POR ERROR de Lucía Boscá (Ed. Ejemplar único)
CAZAR CON HURONES, de Esther Ramón (Icaria Ed.)
HACER HIELO, de Miguel Ángel Curiel (Fund. José Hierro)
Nombré libros de temporada, pero hay otros que releo y cada vez con más provecho.
Poetas que os recomiendo porque en ellos quizá halléis una voz que os susurra muy adentro,
que se hace una habitación ahí donde mirar es vivir.
PAUL CELAN,
EMILY DICKINSON,
ANÍBAL NÚÑEZ,
SAFO,
BLANCA VARELA,
ALEJANDRA PIZARNIK
GLORIA FUERTES,
EDMON JABÈS,
RAFAEL CADENAS,
ANTONIO GAMONEDA,
VLADIMIR HOLAN,
SAN JUAN DE LA CRUZ
SAMUEL BECKETT
CARLOS PIERA
ANNA AJMATOVA
MARINA TSVIETÁIEVA
ROQUE DALTON
MAHMUD DARWISH
WANG WEI
JOHN BERGER
FRANCISCO PINO
CARLOS EDMUNDO DE ORY
OLVIDO GARCÍA VALDÉS
CHANTAL MAILLARD
CESAR SIMÓN
VALERIE MEJER
EDUARDO MILÁN
MARÍA AUXILIADORA ÁLVAREZ
LAURA GIORDANI
YAIZA MARTÍNEZ
OLGA MUÑOZ
OSCAR CURIESES
JULIETA VALERO
BENITO DEL PLIEGO
VICTOR M. DIEZ
LUZ PICHEL,
PEDRO MONTEALEGRE,
JULIO OBESO GONZÁLEZ,
RICARDO POCHTAR
PEDRO CASARIEGO CÓRDOBA
PILAR FRAILE AMADOR
PILAR MARTÍN GILA
MARÍA ZAMBRANO
ÁNGELA FIGUERA AYMERICH
OLGA NOVO
ENTRE OTROS POETAS QUE AÚN NO RELEÍ O QUE NO CONOZCO (y son tantos...)
Podemos pues aventurar para el 2014 buenas lecturas. Que no nos quiten las ganas de leer, de leer mejor y más bueno cada vez, de releer, de dialogar, disentir, deliberar, respirar hondo, tocar, ser tocados por los poemas, por los libros, por las palabras.