Fuente: http://www.elmundo.es/comunidad-valenciana/2015/09/28/5609093de2704e50108b4582.html
A Clara Obligado le gusta el lector inteligente. No el que se sienta a esperar una historia sin más, sino al que no le gusta que se la den hecha. A ese, al que piensa, al que actúa casi como un personaje más está dirigido su último trabajo.
'La muerte juega a los dados' es una recopilación de cuentos individuales para adultos que conforman las piezas de un puzle que, una vez armado, resulta ser una novela policíaca. El último libro de Clara Obligado se presentó el sábado en L'Alfàs del Pi en un encuentro con esos «lectores curiosos» a los que ella adora organizado por Folias, la Asociación Cultural Foro Literario de L'Alfàs del Pi.Clara nació en Argentina y lleva casi 40 años en España pero no es ni argentina ni española. O es las dos cosas. Dice sentirse «extranjera en el mundo» y que eso le sirve para crear historias. «En el mundo de hoy donde tanta gente es empujada de un lado para otro y obligada a perder su cielo y perder su suelo, creo que es una buena situación para un escritor», filosofa. 'La muerte juega a los dados' es un poco como ella, ni de aquí ni de allí, ni es cuento ni es novela sino todo lo contrario. «No pertenece del todo a ningún género. Es una mezcla de cuento con novela», afirma.
El libro tiene todos los elementos que tradicionalmente debe tener una novela policíaca: un muerto en el primer capítulo, un enigma, un arma, falsos culpables y la solución del enigma al final. Sin embargo puede leerse, y funciona, como cuentos independientes. La historia arranca en 1936 en Buenos Aires con el cuento Un cadáver en la biblioteca y finaliza en la actualidad. Héctor Lejárrega, patriarca de la familia Lejárrega, aparece muerto en la biblioteca con un disparo en la sien. A partir de ahí el tiempo santa hacia delante y hacia atrás y, como dice Clara, «el lector no se da cuenta hasta la mitad del libro de qué va el juego». Esa es la clave: jugar. «Pido un lector inteligente que esté dispuesto a jugar conmigo, a divertirse, a participar y a saltar de un tiempo a otro», añade la autora. Lo impredecible La muerte juega a los dados juega con la cita de Albert Einstein, la conocida «Dios no juega a los dados». Mientras que Einstein venía a decir que las cosas son predecibles o que se pueden calcular, Clara rebate esta tesis afirmando que «en nuestra época cuando intentamos calcular, sumar y restar y estamos en manos de la economía de mercado, resulta todo un desastre. No se puede saber lo que va a pasar. La vida es sorprendente». Precisamente el libro discurre entre lo que se puede controlar y lo que no, que es la muerte. El cuento-novela salió a la venta y su autora está muy contenta con la acogida del público. En esa tarea de promoción decidió recalar en L'Alfàs por segunda vez tras una buena primera experiencia. «Me gusta venir porque tiene un público lector sorprendente y reflexivo. Siempre son encuentro muy interesantes. Cada vez que saque un libro pienso venir», apunta. En plena promoción de 'La muerte juega a los dados', Clara acaba de recibir un premio por otro de sus trabajos. La novela breve 'Petrarca para viajeros' ha obtenido este mismo año el premio Juan March Cencillio. No es el único premio. En 1996 ganó el premio femenino Lumen de Novela con 'La hija de Marx'. También ha ganado el premio Setenil con su libro de cuentos 'El libro de los viajes equivocados'. La asignatura literaria pendiente de Clara Obligado es la poesía. Dice ser lectora de poesía pero no escribirla. Viene de una familia de poetas y decidió buscar su propia identidad a través de la narrativa.
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