Fuente: elnuevodiario.com.ni/v
Un poeta que ha perdido entre los dedos del tiempo su origen, afirma que no recuerda cuándo comenzó a escribir. Sin embargo, sabe que su primer libro lo publicó cuando tenía 13 años, en un volumen conjunto con su papá y su mamá, quienes eran escritores.
Así que “Nosotros 3” marcó el inicio de la carrera literaria de Carlos Perezalonso, un poeta leonés que asegura: “Definitivamente mi vocación, por decirlo de alguna manera, está más inclinada hacia la poesía, porque yo me eduqué y me formé como escritor en la poesía y no en la narración”.
Sin embargo, pese a esa aseveración, este autor con obras publicadas en México, El Salvador y Nicaragua, ha ganado dos premios en la categoría cuentos: uno fue el Premio Mariano Fiallos y el otro el Premio Internacional de Cuento Infantil. En poesía obtuvo el premio Joaquín Pasos y mención especial de la revista Plural, que era de Octavio paz.Recientemente, Perezalonso presentó su octavo libro de poesía.
Titulado A mano limpia, gracias a uno de los poemas que integran esta obra, el poeta nos presenta la escritura como fruto del trabajo de una mano limpia, cuyo brazo representa la prolongación del cerebro y del corazón a la hora de crear las palabras sensuales que se acomodan en el papel y se eternizan.
“Un libro duro”
Según compartió el escritor, él siempre ha considerado que cada libro es el testimonio de una época de la vida del poeta, por eso considera que todos los libros son distintos. En el caso particular de A mano limpia, dijo que “es un poco duro, un poco duro de leer porque está lleno o más bien está matizado por el dolor y la experiencia de una época bastante trágica de mi vida, pero también significa la clausura de esa época y el comienzo de otra era”. Y al hablar de que es un libro difícil no exagera, puesto que nos encontramos ante una elegía, quizás no por la muerte, sino por la vida que se acaba, por el amor que se marcha, por la naturaleza que pugna, por las democracias que mueren y una resignación fatal ante el inevitable destino.
Al referirse a la estructura de sus obras, afirmó que los libros los divide en secciones y “aunque parezca mentira tienen un hilo de conducción y van dando sobre el mismo tema nada más que tratado desde diferentes puntos de vista, por ejemplo, una visión reflexiva o una visión con algo de humor o una reflexión de sucesos históricos que también se narran ahí”.
Proyectos
Como se dijo anteriormente, este poeta también narra y entre sus proyectos inmediatos está la publicación de un libro de cuentos titulado La muerte del niño Dios, además compartió su deseo de publicar “El Guerrillero y otras historias”, una obra que se le había perdido y apareció misteriosamente. También recién concluyó El jardín de la cuchilla y dijo que está en proceso de imprimirse.
Carlos Perezalonso no se ha encerrado en una crisálida para escribir, sino que se mantiene a la vanguardia en la promoción de la cultura, por ello preside una fundación en León que se llama Casa de Poeta, desde la que promueve todas las actividades artísticas y hasta cuenta con un programa de televisión y 2 de radio.
“Estos espacios son absolutamente culturales y nos da mucho gusto porque realmente es un esfuerzo que hemos hecho varias personas, incluyendo a mi esposa, María Celia Sandino, y amigos que han hecho grandes esfuerzos para poder mantener ese material de difusión, pues creemos que el arte no es nada más que un medio de comunicación social y la poesía es una forma de comunicación social”, aseveró.
También contempla entre sus proyectos editar libros en formato convencional y en miniatura.