Fuente: correodelcaroni.com/
Alteraturas. Comedia en tres jornadas y un epílogo. Héctor Bello. Ediciones del Perro y la Rana. 60 páginas. Este volumen recoge buena poesía, hermanada con el teatro, tiene como fin desnudar los espacios que van haciendo los años.
El autor es teatrero, diseñador gráfico, además editor. Se percibe una fuerte lluvia de episodios autobiográficos que dan el cuerpo que se desprende hacia la niñez manteniéndose un aspecto reflexivo.
Cantos de ausencias y escritos simples. Ricardo Piñerúa. Edición del Perro y la Rana. Serie Contemporáneos. Colección Poesía Venezolana. Estos textos no sé si acercan a la poesía, no causan ningún asombro, lo que sí creo es que debe ser el autor un buen militante y sin duda su primer libro titulado escritos simples son parecidos a este.
Tiempo. Chiti Matya. Edición de la Fundación el Perro y la Rana. 170 páginas. Cuenta la presentación de contraportada que la escritura de Chiti Matya ha merecido la atención mundial, yo quisiera saber por qué, digo esto ya que no consigo nada excepcional en la obra de este autor chino, tampoco es para decir de que el autor no es poeta porque lo es y bueno, como Mo Yan premio Nobel de Literatura 2012 el autor huele a gobiernero por donde se le escrute pero, repito, su obra tiene cierto fulgor que ojalá se mantenga.
De aroma y otro sueño. José Morillo Araguache. Serie Contemporáneos. Poesía Venezolana. 65 páginas. El autor está formado como artista plástico, esto le da una influencia interesante a su poesía la cual está sustentada en la brevedad, esta exaltación de la sustancia viene también de sus orígenes en el Amazona, donde las palabras se utilizan en el preciso momento y con la carga evocatoria que embriaga.
Alrededor. Carmen Chazzin. Serie Contemporáneos. Colección Poesía Venezolana. 75 páginas. A pesar de lo joven de la autora (1989), se aprecia una madurez que va aunada a un discurso limpio, construido a partir del laberinto inusual desde donde la autora se comunica, con su mirada escrutadora levanta un mapa de la cotidianidad interesante.
De rockolas, sombras y olvidos (Antología discreta) Arnulfo Quintero López. Edición del Perro y la Rana y la Fundación Civil Cultural Gitanjali. 280 páginas. A no ser por las presentaciones o prólogos abundosos y complacientes, estos textos hablaran por sí solos, llegan de lo sublime a caer estrepitosamente en el lugar común, el tiempo se encargará de borrar los malos tratos a la palabra, al lenguaje.
Orú. María Angélica Ascanio. Serie Contemporáneos. Colección Poesía Venezolana. 120 páginas. Con este libro se demuestra una vez más la generosidad editorial pues nada pudiéramos considerar interesante, prevalece profusión de palabras, de ideas que no se sostienen, quedan en vilo, piezas retóricas que no dan con el asunto.
Meridiano del sol, Antología poética (1982-2008). Marissa Arroyal. Monte Ávila Latinoamericana. Colección Altazor. 210 páginas. En esta antología, que es igual a recoger lo más granado, lo mejor, la sustancia no está por ningún lado. Hay agregación de estados sentimentales que rayan en la futilidad y por supuesto no cierran ni abren ninguna puerta, algo que debe caracterizar a la poesía es eso que tiene que ver con el sentido de conmoción y que no pude corroborar en sus 200 páginas.
Glorioso animal. Antología (1956-2010). Asdrúbal Meléndez. Edición a cargo de Monte Ávila Latinoamericana. Colección Altazor. Esta poesía se basa en las interrogantes que al dejar de ser o disolverse dan sentido a la vida. No hay riesgos en el tratamiento del lenguaje y los temas se quedan muchas veces en vilo. Este libro es una catarsis con rostro poética.