Fuente: inforegion.com
El movimiento Acción Poética (AP) nació hace 15 años en Monterrey, México. La idea fue creada por el poeta Armando Alanis Pulido y se expandió por toda Latinoamérica. En Argentina, hay más de 30 ciudades en las que se adoptó la iniciativa de pintar poesía y fragmento de literatura en los muros.
Los muros son ofrecidos por los propietarios de los inmuebles y luego pintados por los integrantes del movimiento. Todos pueden acercarse a pintar y participar de la realización del mural; a través de las redes sociales, convocan a los vecinos para participar.
Verónica Fernández es coordinadora de Acción Poética de Avellaneda y hace no más de un mes que creó el movimiento en la ciudad. A poco tiempo de comenzar la iniciativa, ya pintaron ocho murales y se reúnen todas los sábados para planificar los próximos. Muchos vecinos se acercaron para participar.
“Queremos llevar poesía de la calle, yo tuve una cultura con poesía, en mi casa siempre se leyó”, contó Verónica en un diálogo con Info Región. “Es una convocatoria de todos los vecinos, cada vez somos mas: hacemos reuniones y después seleccionamos los murales que nos permiten los dueños”, añadió.
Daniela Diez coordina el movimiento de Acción Poética, de Banfield, y siempre se reúne con sus compañeros para la realización de los murales en distintas localidades de Lomas de Zamora. Su equipo de trabajo es considerable y son muchos los vecinos que ofrecen las paredes de sus viviendas para pintar fragmentos literarios o poesías en ellos. Han pintado muchos murales en estaciones de tren, casas y cualquier lugar donde pueda caber una pequeña frase motivadora.
“Nosotros buscamos expresar poesía y literatura en los muros, tratar de que las personas que pasen por ese mural se lleven una buena sonrisa”, explicó Daniela en un diálogo con Info Región.
Los murales que se pintan, muchas veces poseen frases motivadoras, cuyo objetivo es transmitir ideas positivas a las personas que viajan o simplemente se encuentran caminando por su barrio.
Los movimientos respetan algunas reglas, que van variando levemente según las ciudades donde se instalan. Las personas que participan deben comprometerse en continuar dentro del movimiento, solicitando las paredes para pintar a los mismos dueños del lugar. No se acepta dinero, sólo donaciones de pintura color blanco y negro, además de pinceles para trabajar.
Las frases, por otro lado, se seleccionan de acuerdo a las dimensiones del muro, el contexto, la orientación de la calle y depende de la elección del dueño del lugar que haya autorizado la realización del mural. Deben formar partes de micro poesía, que definen pequeñas ideas y pensamientos. Los primeros diez muros se pintan con frases del poeta Armando Alanis Pulido, como un modo de homenajear al creador de este movimiento.
Pequeños fragmentos poéticos como “Ayuda a tu destino” o “Sin poesía no hay ciudad” se ven expresados en diversos muros de las ciudades, con ayuda de todos los vecinos que concurrieron a la realización con pinceles en mano.