El alcalde de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco, ha entregado esta mañana el XVIII Premio de Novela "Ciudad de Salamanca" a Miguel Fernández-Pacheco por la obra "Ava la loba", una historia de licantropía femenina ambientada en época de Carlos Martel (S.VIII).
Esta novela fue elegida como ganadora por un jurado presidido por Luis Alberto de Cuenca y del que también formaron parte: África Vidal, Emilio Pascual, Fernando Marías y José Antonio Cordón. Este año se habían presentado 125 novelas, en su mayoría procedentes de España (113), aunque también se recibieron originales desde Alemania, Argentina, Colombia, Cuba, Estados Unidos, México y Puerto Rico.
De "Ava la loba" destacaron su agilidad narrativa, su buena prosa y una gran maestría en el uso del lenguaje por parte del autor. La dotación económica del premio es de 15.000 euros y la publicación de la obra por Ediciones del Viento.
El autor, Miguel Fernández-Pacheco, nació en Jaén en 1944. Es dibujante, diseñador gráfico y profesor titular de Ilustración de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Salamanca. Actualmente se dedica, sobre tod, a la literatura.
Tiene más de 15 novelas editadas, entre las que destacan: Marilyn Monroe, rubia, 94-58-91; El retrato de la dama ausente; Garval; Macat... En los años 70 publicó, junto al cineasta salmantino José Luis García Sánchez, 85 títulos para niños que se tradujeron a 11 idiomas y recibieron diversos galardones en todo el mundo. Es también conocido por ser el creador gráfico de los "electroduendes", muñecos del famoso programa de televisión La bola de cristal.
Como escritor ha recibido, entre otros, el premio Apel.les Mestres por La familia de Mic en 1993; el Lazarillo de Creación Literaria por Los zapatos de Murano en 1996; y el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil por Verdadera historia del perro Salomón en el 2001.
XVII Premio de Poesía "Ciudad de Salamanca"
El alcalde ha entregado a Carlos Fernández Aganzo el XVII Premio de Poesía "Ciudad de Salamanca", dotado con 8.000 euros, por el poemario En la región de Nod. El título hace referencia a la tierra estéril donde, según el Génesis, habitó Caín después de matar a su hermano. La obra cuenta con crudeza la desolación del fugitivo que ha perdido el Edén, indaga sobre la causa de la desesperación y el castigo, interroga sobre el perdón y busca una salida a un estado anímico asolado por las pérdidas.
El jurado encargado de otorgar este premio estuvo presidido por Antonio Colinas y formaron parte de él: Asunción Escribano, César Antonio Molina, Clara Janés, José Luis Puerto y Juan Antonio González Iglesias.
En esta edición de este certamen se habían recibido 229 poemarios procedentes en su mayoría de España (190). La procedencia del resto fue de Alemania, Estados Unidos, Italia, Venezuela, Argentina, Colombia, Cuba, Bélgica, Costa Rica, Ecuador, Israel, México, Nicaragua, Nueva Zelanda, Perú y Puerto Rico.
Carlos Aganzo nació en Madrid en 1963, es poeta, escritor y periodista. Desde 2009 dirige el diario El Norte de Castilla y ha dirigido también los rotativos La Voz de Huelva y Diario de Ávila.
Su primer poemario, Ese lado violeta de las cosas, se publicó en 1998 y a partir de entonces se han ido publicando Manantiales (2002), Como si yo existiera (2004), La hora de los juncos (2006), Caídos Ángeles (2008), Las voces encendidas (2010) y Las flautas de los bárbaros (2012). Además es autor de varios títulos de la colección e viajes "Ciudades con encanto" de El País-Aguilar y del ensayo biográfico Jorge Pardo, Improvisaciones.
Entre otros, ha obtenido los premios Jorge Guillén, Jaime Gil de Biedma y Universidad de León de Poesía.
Es miembro de la Academia de Poesía de San Juan de la Cruz de Fontiveros. En septiembre de 2012 le fue concedido el Premio Nacional de la Letras Teresa de Ávila.
El alcalde de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco, recordó que, durante todo el año, el Ayuntamiento apuesta por la cultura, pero estos Premios "ratifican nuestro compromiso con la creación literaria".
"Salamanca –continuó el alcalde- es Capital Cultural Europea y Ciudad del Español por muchos motivos, pero también porque entendemos la lengua como un elemento vivo y como uno de nuestros principales patrimonios".
Agradeció, además, el compromiso y la lealtad con la ciudad de Salamanca de las dos editoriales, Ediciones del Viento y Reino de Cordelia, que son "los altavoces" de estos premios y que personalizó en Eduardo Riestra y Jesús Egido, "oficio de editor que tiene un alto componente de épica y de resistencia".
Fernández Mañueco también destacó la "estrecha vinculación" con la ciudad de Salamanca de los dos premiados, Miguel Fernández Pacheco, jienense pero profesor titular de Ilustración de la Facultad de Bellas Artes de Salamanca, y Carlos Aganzo, vinculado con esta Comunidad Autónoma a través, sobre todo, de su profesión periodística.