Fuente: madridactual.es
El alcalde de Majadahonda, Narciso de Foxá, ha entregado el XXIII Premio de Poesía 'Blas de Otero' al escritor, actor y director de teatro, Ángel González Quesada, por su obra 'Papeles del cautivo'.
El acto contó con la presencia de la viuda del poeta Blas de Otero y presidenta de su Fundación en Bilbao, Sabina de la Cruz, de la concejal de Cultura, María Fernández Dobao, y de los miembros del jurado: Juan Van Halen, Enrique Gracia Trinidad, José Luis Morales Robledo y Mario Hernández Sánchez, que fue el encargado de presentar el libro.
Según destacó el alcalde en su intervención, el Premio de Poesía 'Blas de Otero' de Majadahonda tiene el objetivo de "reconocer la creación poética libre de autores a los que Majadahonda quiere dar un gran empuje en su carrera literaria". Por esta razón, además del premio en metálico y la placa, el galardón incluye la publicación de 1.000 ejemplares de su obra en primera edición gracias a la 'Colección Julio Nombela', de la Asociación de Escritores y Artistas Españoles.
"Quiero destacar el interés que este premio despierta en el panorama poético español, con la participación en esta ocasión de 40 obras que recogen gran variedad de tendencias", explicó de Foxá que concluyó con un recuerdo emocionado a Blas de Otero y con un mensaje para los creadores literarios a los que animó a presentarse a este certamen donde podrán "demostrar la fuerza creativa de la poesía escrita en español".
El acto concluyó con un concierto de música de cámara a cargo de los alumnos del Conservatorio Profesional de Música de Majadahonda.
González Quesada nació en Salamanca en 1952 y es licenciado en Filosofía, escritor y poeta, además de actor y director de teatro. Su actividad literaria se centra, fundamentalmente, en la poesía y el ensayo, aunque ha obtenido importantes reconocimientos en narrativa.
'Papeles del cautivo' es su libro de madurez y, al tiempo, un capítulo más que engrosa, amplía y clarifica la obra de una autor cuya poesía constituye un ejemplo de coherencia conceptual y lingüística.
Sus temas, siempre conectados a la reflexión sobre el mundo y los lugares que en él representamos, simulamos vivir o intentamos ocupar, se muestran en esta obra como peldaños de un recorrido intramuros del pensamiento literario.