Hasta la lluvia ha querido acompañarme", admitió ayer, emocionado, Pablo García Baena, al recoger el Premio de las Letras Andaluzas Elio Antonio de Nebrija, de la Asociación Colegial de Escritores de España sección de Andalucía, en un acto celebrado en el salón de los Mosaicos del Alcázar de los Reyes Cristianos en el que fue arropado por numerosos compañeros de profesión y representantes institucionales.
El poeta cordobés subrayó "el cuido del lenguaje que hizo Cántico en un tiempo difícil para la literatura", en el que de un lado se encontraba "lo elaborado y un tanto cursi" de Garcilaso y, de otro, "la desaliñada poesía social". Por esto, afirmó al ser preguntado por los periodistas que este galardón, que recibe el nombre de un gramático, "es lo que mejor nos viene".
García Baena agradeció el apoyo de los presentes con unas palabras salpicadas de humor (mencionando, entre otros, la escasa humildad de Bette Davis al recoger un premio o a Luis de Góngora) y aseguró que "cualquier persona que no fuera Pablo estaría agobiado de tanta amistad y cariño, pero Pablo parece que sale de todos esos momentos como si nada, aunque le dejen una señal en el corazón". En referencia a la figura que da nombre al premio, también recordó que "estamos obligados a entendernos y eso lo hizo posible Nebrija".
Unos momentos antes de la entrega de este reconocimiento, en un encuentro con los medios de comunicación, apuntó que "lo agradezco como un gran honor para mí y para mis libros", aludiendo a "mi pequeña obra" y precisando que "tengo más años que labor literaria". García Baena avanzó que "ahora intento todavía publicar un libro nuevo de poesía. No sé si me dará tiempo, porque trabajo lentamente". De este modo, comentó que "la poesía hay que trabajarla, parece que es intuitiva y tal, pero luego tiene también sus horas" y, al ser inquirido por la temática de esta obra, explicó que "soy solo un poeta, no soy un vate", para concluir que "será lo que salga, como todos mis libros. Conforme va la vida rodando, va el libro ampliando sus páginas".
RECONOCIMIENTOS Por otro lado, el presidente de la sección andaluza de la ACE, el cordobés Manuel Gahete, destacó que la sexta edición del Elio Antonio de Nebrija "le tocaba inexcusablemente a Pablo García Baena", al que definió como "el autor cordobés vivo más representativo, muy considerado a nivel nacional". En esta línea, detalló que este autor "representa la transición más importante de la poesía a partir de la posguerra, con Cántico", porque este colectivo forjó "una poesía realmente auténtica, visionaria, poética, que contrasta con lo que se hacía en el entorno nacional".
Antonio Garrido Moraga, parlamentario y miembro de ACE, realizó una semblanza del homenajeado y la entrega de este premio fue presidida por el propio Gahete junto a Montserrat Reyes, viceconsejera de Cultura; Pilar Gracia, diputada de Recursos Humanos de la Diputación provincial; Francisco Cañadas, de la Obra social de Unicaja; José Sarría, secretario de ACE, y José Antonio Nieto, el alcalde de Córdoba, que subrayó en la clausura del acto que "he asistido a un momento histórico", además de lanzar distintos elogios al poeta premiado, asegurando que "Pablo es Córdoba".
PILAR COBOS