Fuente: https://www.diariocordoba.com/cuadernos-del-sur/2024/12/14/cuarenta-anos-poesia-112559295.html
Bajo el título de ‘Acto de presencia’, Carlos Alcorta (Torrelavega, 1959) reúne en orden cronológico toda su poesía publicada a lo largo de cuatro décadas.
El poeta cántabro ha dejado fuera de este recuento los poemas aparecidos tanto en volúmenes colectivos como en publicaciones de circunstancias, el libro ‘Variaciones y reincidencias’, la ‘plaquette Ritual de la luz ‘ y los haikus y otras formas breves aparecidas en ‘Tiempo vivo’ y en otras ediciones artesanales. Asimismo, ha incluido, con acierto, ‘Doureios Hippos’ (1986), que tiene una continuación en Lusitania (1988), y ‘Los demonios del mediodía’ (1997), hasta ahora inédito. Con estas incorporaciones, el prosista y crítico literario ofrece al lector catorce poemarios: ‘Un lugar en la memoria’ (1988), ‘Condiciones de vida’ (1992), ‘Cuestiones personales’ (1997, Premio Alegría-José Hierro), ‘Compás de espera’ (2001), ‘Trama’ (2003; accésit del Premio Ciudad de Salamanca), ‘Corriente subterránea’ (2003; Premio Hermanos Argensola), Sutura (2009), ‘Sol de resurrección’ (2009, Premio José Luis Hidalgo), ‘Ahora es la noche’ (2015), ‘Aflicción y equilibrio’ (2020) y ‘Fotosíntesis’ (2020), además de tres poemas inéditos que muestran su confianza en una obra en marcha.
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Este continuo hacerse la obra lo lleva a revisar y corregir varios poemas, según él mismo confiesa en la nota introductoria. Pese a ello, la disposición cronológica de los distintos libros permite al lector hacerse una idea de su evolución poética, establecer conexiones entre unos libros y otros y entresacar un conjunto de símbolos, constantes estilísticas, motivos y temas sobre los que se ha construido una obra sólida que, encuadrada en la llamada generación de los 80, ha sabido ir evolucionando hasta adquirir una evidente singularidad.
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Apegado inicialmente a apuestas más metafísicas, desde ‘Condiciones de vida’ el poeta inicia un giro hacia el poema más narrativo y conversacional que se mantendrá, con variantes, hasta hoy en día. Al hilo de anécdotas y de situaciones en apariencia intrascendentes, articula un discurso narrativo, no exento de las dosis precisas de lirismo, que busca sintetizar un pensamiento. En este sentido, juegan un papel muy significativo la descripción de situaciones y ambientes cotidianos que actúan como punto de partida para la reflexión. A partir de ‘Trama’ y, muy especialmente, de ‘Corrientes subterráneas’ y ‘Sutura’, cobra más peso este proceso de reflexión existencial por parte de un sujeto complejo que contempla las grietas propias y trasciende la anécdota para iniciar un proceso de indagación introspectiva a través de la escritura. Además, el poema se despoja de todo lo accesorio y brilla por la parquedad y sencillez de una palabra desnuda y abierta al otro, sobre la cual construye un discurso elegíaco que, al mismo tiempo, deviene en un canto a la vida, cuya mejor definición se nos ofrece en los dos últimos libros: ‘Aflicción y equilibrio’ y ‘Fotosíntesis’.
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‘Acto de presencia’.
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Autor: Carlos Alcorta.