Fuente: http://cultura.elpais.com/cultura/2015/06/15/babelia/1434368893_767015.html
Dotados de una identidad trémula, difusa, recelosos de las dicotomías. Con la ventaja de haber llegado a ser casi nativos digitales y el privilegio de acortar la distancia entre las dos orillas. Alimentados por sus referentes vivos y en paralelo a la edad del tiempo, desde Góngora y sor Juana Inés de la Cruz a Lorca, Neruda, Rubén Darío o Alejandra Pizarnik y Ángel González...